Ya por muchisimos años la tv nos ha predispuesto al aquetipo o modelo de navidad perfecta donde todos se sobreponen a las dificultades, situaciones, obstaculos, en fin todo lo que se atraviese por el medio con tal de no pasar la nochebuena sin las figuras protagonicas padre, madre, hijos, abuelos, independientemente de si la filiación es sanguinea o no. Y uno y otro año nos hemos aferrado a ese prototipo, y siempre, cada año las fiestas se ven empañadas con la añoranza de quien no esta a nuestro lado por la razón que fuera. La nostalgia, por aquellos que se han ido, por el hermano con quien tuve una pelea, porque se fue de viaje, por mi mamá... En fin en ese instante de las doce campanadas pareciera que uno hace un recuento del año y según el balance terminas arropado por la emoción y hasta lloras, de alegria o tristeza. Es un momento como de catarsis para deslastrarse de aquello que te ata al pasado y podamos recomenzar libres, sin handicaps. De uno depende aprovechar esos momentos.
Por otra parte, este año aprendí que uno no debe estar con quien piensa uno que debe estar sino con quienes estemos en ese momento y que por esa fecha somos la familia, los que nos hemos encotrado para celebrar esta tradicion de miles y que la conexión no es fisica ni es necesario el abrazo fisico para vivir el momento y sentir a quien amas cerca...
Este año nuevo con toda seguridad mas que ningun otro año celebraré con mucha mas alegria y emoción el fin de año con Mary , Abel y Mirtha, a quienes mas amo y seguimos juntos aquí en el mundo fisico y sentiré el abrazo de año nuevo y esperanza de Aracely, Leandro, Eduardo, Irama y Eleazar a quienes llevo conmigo siempre en mi corazón.
Feliz año 2006 a tod@s!
miércoles, diciembre 28, 2005
lunes, diciembre 05, 2005
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